Sostenibilidad medioambiental
EL ALGODÓN EUROPEO DISEÑA UN MUNDO SOSTENIBLE
El algodón europeo se produce de acuerdo con los Reglamentos y Directivas de la Política Agrícola Común (PAC) de la UE, que se encuentran entre los más estrictos del mundo. Estas directrices garantizan que el algodón se cultive de forma sostenible, minimizando el impacto ambiental y promoviendo prácticas agrícolas responsables.
Este firme compromiso del sector algodonero europeo con la sostenibilidad responde no sólo a la creciente preocupación mundial por el impacto medioambiental de todas las acciones humanas, ni sólo a la demanda de los consumidores de productos respetuosos con el medio ambiente. Responde a la firme creencia y convicción del sector de que diseñar un mundo más sostenible es posible.
Pero, ¿cómo hacerlo? Además de hacer un uso más responsable de los recursos naturales y reducir el uso de productos químicos, el algodón europeo contribuye a diseñar un mundo más sostenible de muchas maneras:
El algodón europeo no contiene OMG
Se cultiva a partir de semillas no modificadas genéticamente mediante prácticas agrícolas sostenibles.
El cultivo del algodón contribuye a reducir el calentamiento global
Durante los meses más calurosos del año, gracias a su gran superficie foliar.
El cultivo del algodón aporta oxígeno a la atmósfera
Y produce tres veces menos gases de efecto invernadero que la producción de fibras sintéticas como el poliéster.
Las fibras naturales, como el algodón europeo, son 100% biodegradables
Lo que las convierte en la opción ecológica perfecta.
Todo ello sitúa al algodón europeo, de origen griego y español, como un referente mundial en términos de sostenibilidad.
Por lo tanto, al elegir algodón europeo, está apoyando un modelo de producción sostenible, basado en las prácticas más éticas y respetuosas con el medio ambiente.